Páginas

domingo, 3 de marzo de 2013

Largo Recorrido, Pamplona



Nuestra primera parada será en Pamplona



Empezamos nuestra particular ruta de pintxos en el restaurante Álex Múgica, sin duda fue de lo más acertado, ubicado en la calle Estafeta. Una de las calles más conocidas y transitadas de la ciudad Navarra. Es una gozada pasear por esta calle y disfrutar de su ambiente. 



Nos gusto muchísimo el local, acogedor y con muy buen ambiente.
La chica que nos atendió muy atenta y profesional, comentamos con ella algunos pintxos y finalmente nos decidimos por una pequeña degustación de entre alguna que nos ofrecían en la carta, degustación Hemingway, Estafeta, Encierro...

Así qué degustación estafeta para comenzar nuestra ruta sería perfecto.

Pencas de Acelga en Tempura con Hongos y Foie
Nos gustó muchísimo, texturas, sabores, muy bien elaborado!






Anchoa con Txangurro, Menuda Lata!
Vaya exquisitez, tremendo pintxo!

Albóndigas de Bonito con Tomate y Pimientos Verdes 

Lamento que no se pueda leer completamente, porque con una receta como esta no es extraño que lo hagan tan bien. Es un sitio que recomendamos con total tranquilidad.

Aprecias perfectamente los sabores, suaves y muy bien equilibrados en una proporción muy acertada.
Mezcla de sabores y cocina tradicional con una cocina actual en perfecta sintonía, que conviven perfectamente.

Antes de irnos preguntamos a un señor, que hablaba con nosotros de cocina, qué bar nos recomendaba, pensábamos fiarnos de su criterio porque nos pareció que conocía bien la ciudad y su cocina.
"...yo lo conozco por Monasterio, se llamaba así antes, ahora creo que se llama MÔ..."
Seguimos su recomendación, fue otro acierto!







Después de tomar estos maravillosos pintxos nos fuimos al fronton Labrit, aquella misma mañana habíamos recogido nuestras entradas.

Por la tarde había que ver a Olaizola II  e Ibai Zabala contra Bengoetxea VI y Beroiz.

Vaya ambientazo!  
Vaya espectáculo!!!





A mediodía del día siguiente estábamos dispuestos y preparados para seguir degustando algo más, así que nos fuímos directamente a MÔ, nos lo habían recomendado el día antes y aquella misma noche lo localizamos.

Vimos que no era muy grande y hacía un poco de frío para estar en la calle, así que llegamos pronto. Y nos fuimos muy tarde por cierto.











Nos dimos cuenta rápidamente de que su barra de pintxos era distinta, estaban muy bien presentados y los camareros terminaban muchos de ellos delante del cliente. Tenía todo muy buen aspecto, como el día anterior en Alex Múgica los camareros lo hacían muy bien, super atentos y te explicaban todo perfectamente. 


En un primer plano un clásico Gildas XXL, Aceitunas, Anchoas, Piparras, las terminaban con un poco de Aceite de Oliva Virgen y un poco de Polvo de Aceituna.

Te puedes imaginar, buenísimas!







La carta se dividía en fritos, pinchos, latas, tempuras, clásicos, tostas y postres.

El siguiente: Mô Burger mini hamburguesa de Wagyu
 (Kobe) con mahonesa de trufa blanca.

Te lo presentan en una cajita pequeña, con la mahonesa para untar a tu gusto, desprendía un olor inconfundible y muy agradable.

El panecillo crujiente, y la hamburguesa bien marcada y rosa en el centro, sencillamente impresionante. Una hamburguesa de nivel, para repetir, de lo mejor sin duda.







Probamos todas las sugerencias del grupo de las latas, en la imagen:

Matrimonio de Anchoas con Caviar de Aceite y Arbequina.


También degustamos:

Lomo de Bonito con Piparras y Cebolla Roja







Mejillones en Escabeche con Pomada Picante 

Sashimi de Salmón y Rábano, Mahonesa con Sésamo Negro y Salsa de Soja


Huevo Frito de "Sagartoki"

Kebab y no vuelve de Pluma Ibérica







Calabaza, Calabacín y Cebolleta con Alioli de Azafrán y Naranja

Carrillera Ibérica con Puré de Patata

Croquetas de Jamón, Bacalao y Queso Azul con Nueces

Natillas de Queso con Toffee y Galletas Speculoos




No quiero parecer exagerado, ya comenté antes que salimos tarde, son muchos pintxos los que tomamos  aquí.
Todo tiene una explicación, ese mismo día por la noche pedimos algo en otro bar que nos comentaron  y preferimos seguir con la carta de MÔ, con eso creo que lo decimos todo, volvimos al mismo bar de mediodía porque nos había encantado, pero de verdad!
Buen producto, bien elaborado y presentado, un nivelazo!

Una estación con parada garantizada, por su alta cocina.